Hace mucho tiempo que no palpaba las dimensiones del miedo... ese miedo que aturde, deja sin aliento, hace temblar las piernas y nubla la visión... ese miedo que limita nuestros sentidos, nuestra capacidad de razonar y nos provoca ese deseo incontenible de huir lo mas lejos posible de la realidad a la que nos enfrentamos, de saltar al abismo si es necesario con tal de escapar de la verdad que creemos ver dibujada en nuestro futuro...
Al palpar ese pequeño bulto senti como mi corazón se detenia unos segundos en la incertidumbre de la duda y que luego ante la certeza del hallazgo, se remontaba en un latido ensordecedor que me dejaba sin aliento... mil cosas pasaron por mi mente, todas espantosas y senti miedo... terror de lo que, segun mi optica, ese pequeño bulto significaba. Llegue a sentir el deseo sincero de olvidarme de ese segundo de mi vida, de cerrar los ojos y .... en fin seguir adelante como si nada hubiera sido detectado en mi... me quede en silencio deseando poder decir lo que mi esposo queria oir... que siempre habia estado ahi, que era normal, que no debiamos preocuparnos, pero era mentira, ahi estaba donde nunca lo habia sentido, no era normal y era bastante grande... el miedo me impedia pensar con claridad y solo lograba vislumbrar catastrofe, tristeza, dolor y soledad...
No le temo a la muerte, se con certeza lo que voy a encontrar despues de ella y eso no me produce sino confianza en un futuro mejor... pero tengo miedo de dejarle solo en lo que aun queda de camino en este mundo, miedo de hacerle llorar y perder la esperanza, miedo de dejarlo abandonado en su dolor, dejarlo sin una mano que acaricie su rostro, que seque sus lagrimas y sin un beso que consuele su corazón...
Solo es que tengo miedo de dejarlo amandome en soledad....
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